viernes, 6 de noviembre de 2009

Tu Voluntad es la mía

Padre, Tu Voluntad es la mía, y nada más lo es.
No hay otra voluntad que yo pueda tener. Que no trate de forjar otra, pues sería absurdo y únicamente me haría sufrir.
Sólo Tu Voluntad me puede hacer feliz, y sólo Tu Voluntad existe.
Si he de tener aquello que sólo Tú puedes dar, debo aceptar lo que Tu Voluntad dispone para mi y alcanzar una paz en la que el conflicto es imposible, Tu Hijo es uno Contigo en ser y en voluntad, y nada contradice la santa verdad de que aún soy tal como Tú me creaste.

UCDM

3 comentarios:

  1. Rendir tu voluntad es aceptar lo que llega como lo que es, sin juicios, confiando que es lo mejor, sintiendolo en tu corazón, donde mora la Divinidad.

    Un abrazo Andy.

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  2. Muy bello blog Andy, y este post ES...

    un gran abrazo zen, Namasté.

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  3. Debemos esperar lo que él nos mande, aunque a veces no nos guste...en él todo a su tiempo sera perfecto.
    Me ha encantado tu escrito, te mando besitos y bendiciones para ti.

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